Lo que tenemos aquí es la respuesta oficial la marca de los tres diamantes a la hegemonía de Peugeot en el Dakar y demás rallies. Este, de hecho, fue el prototipo desarrollado por el importador francés Sonauto con apoyo de fábrica, el único coche capaz de plantar cara al intocable 405 T16 de Ari Vatanen. Permítenos sumergirte en un viaje al pasado de los rallies con la historia del Mitsubishi Montero Dakar de 1988.
El equipo de Mitsubishi Motors comenzó a mejorar los prototipos del Montero para cumplir con las mayores velocidades competitivas requeridas para el Rally Dakar a finales de los 80. Entre otras muchas cosas, aumentó la distancia entre ejes y el recorrido de la suspensión, lo que mejoró la estabilidad en línea recta y el manejo en curva. El motor pasó a entregar una potencia máxima de 275 CV y un par máximo de 390 Nm mediante la turboalimentación del bloque 4G54 de cuatro cilindros en línea y 2,6 litros, y la mayor compresión.
Además, la carrocería también se rediseñó aerodinámicamente, lo que permitió que el 4×4 nipón alcanzara una velocidad punta de 200 km/h. El prototipo fue concebido en el Centro de Tecnología de Automóviles de Pasajeros de la marca en la ciudad de Okazaki (prefectura de Aichi) en Japón. Utilizando un modelo de arcilla a escala ¼, diseñaron lo que llamaron un “cuerpo en forma de huevo” donde la parte posterior es redondeada. El modelo se sometió a un túnel de viento para reducir el coeficiente de arrastre (Cd) en un 20 %.
Los prototipos de 1988 fueron conducidos por Andrew Cowan y Pierre Lartigue, de Francia. El japonés Shinozuka y el francés Bernard Béguin condujeron los prototipos de 1987
Gracias a ello, le permitió al todoterreno tener el potencial para alcanzar una máxima de 220 km/h, según los cálculos. Sin embargo, incluso con tales mejoras, también era un hecho que, al estar basado en la estructura de chasis de escalera de los vehículos producidos en masa, el coche no alcanzó el nivel de los prototipos de Peugeot que usaban una estructura de marco tubular.
Para el gran evento, el equipo de fábrica de Peugeot presentó cuatro potentes prototipos, que incluían el nuevo 405 conducido por Ari Vatanen y Henri Pescarolo, y el 205 Turbo 16 llevado por el campeón mundial de rallyes Juha Kankkunen y Alain Ambrosino. Además, los equipos competitivos como Range Rover, Porsche, Lada y Mercedes Benz también atrajeron una atención considerable, con un récord de participación de un total de 603 vehículos, el mayor número hasta ahora en la historia del Rally Dakar.
En la clase de coches de producción modificados, los equipos privados monopolizaron los primeros cuatro lugares del Dakar 1988 equipados con un Mitsubishi Montero
El recorrido del 10º Dakar era de 12.874 kilómetros, de los cuales las etapas competitivas (SS) sumaron 6.884 km. Fue el último año que el evento partió de Versalles, rumbo al sur de Francia antes de aterrizar en Argel. Después de llegar a la costa del norte de África, el rally se dirigió hacia el sur, de Argelia hacia Níger, a través de Malí y Mauritania, después de un día de descanso en Agadez y, finalmente, llegó a la meta en Lac Rose en Senegal, una ruta que no cambió en nada con respecto a años anteriores.
Sin embargo, el curso resultó ser arduo, ya que más de 100 vehículos se retiraron el primer día en Argelia. Además, se produjeron un total de siete accidentes mortales, principalmente en tramos de alta velocidad, y cuatro de las etapas especiales fueron canceladas debido a las tormentas de arena. Aún así, el rally estuvo dominado por Peugeot desde el principio, (a pesar de que el coche de Vatanen fue robado en el vivac de Bamako, Malí). Aunque el coche fue devuelto, no pudo comenzar a tiempo y se vio excluido.
Kankkunen, que hacía su primera aparición en el evento, tomó la delantera y ganó el rally, confirmando la resistencia y velocidad que mostró en su participación en el WRC. Shinozuka ocupó el segundo lugar en la general, un lugar más alto que el año anterior. A la par, Cowan y Lartigue luchaban por el liderato desde el principio, pero se vieron obligados a retirarse por sobrecalentamiento. Además, el Montero obtuvo resultados muy buenos, con la pareja holandesa Tijsterman logrando un impresionante octavo lugar.
Aún así, tanto Lartigue como el Mitsubishi Montero lograrían mayor éxito en el París-Dakar: después de terminar segundo con un ejemplar en 1991, Lartigue se pasó a Citroën y triunfó en la competición más dura del mundo desde 1994 hasta 1996; Otros Montero remataron el éxito de Lartigue con victorias generales en 1992, 1993, 1997 y 1998, y luego la notable racha de siete victorias consecutivas de 2001 a 2007. Pero Lartigue tenía debilidad por ese Montero de 1988. Fue un coche que ocupó un lugar en su corazón.
Tras permanecer con Pierre Lartigue hasta 2021, este Mitsubishi Montero ha sido parte de una colección de ilustres modelos de los rallies como un Opel Manta GT/E de 1976
Después del París-Dakar, consiguió un par de segundos puestos en el Rally de Tunisie y el Rally de l’Atlas, ganó el Course de Cote TT de Brive y el Rally de Tunisie de 1989, y luego hizo un par de sextos puestos en el Rallye TT de Cognac y el Rallye TT de Vitrolles. Y, a pesar del cambio a Citroën, mantuvo el Montero desde el momento en que Mitsubishi terminó con él después de la temporada de 1989, hasta 2021. Desde entonces, el Montero de Lartigue fue a parar a manos de un coleccionista francés, que lo restauró a su estado del París-Dakar de 1988 y lo convirtió en la pieza central de una pequeña colección.
Ahora, este Mitsubishi Montero Dakar de gran palmarés deportivo puede ser tuyo, pues se subastará el próximo 2 de abril en la venta de Aguttes –junto al Audi quattro que no es un Audi quattro–, que tendrá lugar en el Hotel Espace Champerret de París. El precio estimado es de 250.000 a 350.0000 euros, una cifra que no lo aleja mucho del Pajero Evolution de homologación presentado a finales de la década de 1990.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS