Las Pickups son, sin duda, los vehículos más vendidos para el ocio o el trabajo al otro lado del charco. Tanto es así que, en el pasado año, el podio de ventas lo coparon las tres pickups grandes de los tres de Detroit, siendo la Ford F150 la más vendida, seguida de la Dodge Ram y la Chevrolet Silverado en un más que meritorio tercer puesto.
Estos vehículos, que son preferidos de los estadounidenses, han experimentado una curiosa metamorfosis desde principios de este siglo, que les ha convertido en auténticos artículos de lujo para todo tipo de usos y que poco tienen que ver con las rudas camionetas de trabajo de antaño. Aunque, por supuesto, siguen vendiéndose versiones básicas para roles más comerciales o campestres. Como muestra, si vas al configurador de Ford de Estados Unidos y configuras una F-150, encontrarás que el precio base de la versión XL es de unos 30.000 dólares, mientas que si optas por la más lujosa, la F-150 Limited, tendrás que desembolsar la friolera de 74.000 dólares, aunque hay que decir que el equipamiento y las posibilidades que vienen con ella son inmensas.
Las pickups son el epítome del vehículo estadounidense de recreo. Grandes, imponentes y con un sinfín de posibilidades, eso sí, con un precio solo a la altura de su tamaño
Pero, ¿qué pasa si eres un auténtico quemado de las carreras Baja? Sí, esas competiciones en las que las camionetas preparadas o “Trophy trucks” recorren todo tipo de terreno roto a más de 200 kilómetros por hora. Pues si eres de ese tipo de personas, seguramente ya conocerás las pickus más bestias que ahora mismo se ofrecen en el mercado yankee: la Ford F-150 Raptor o la Dodge Ram 1500 TRX.
Fue en el 2009 cuando Ford sorprendió al mundo con una camioneta que, de serie, era capaz de circular por pistas de tierra a una velocidad impensable para cualquier otra pickup a la venta. Había nacido un icono que ha ido evolucionando hasta su tercera generación, lanzada en 2021, y cuya receta permanece intacta.
Como ya sabrás, la Ford F-150 Raptor no es un vehículo cualquiera y si es tan capaz es por varios elementos que la hacen única. Comenzando por la suspensión, cuya configuración no es compartida por ninguna otra variante de la gama F-150. Presenta amortiguadores activos firmados por Fox y un recorrido de suspensión un 25% superior al de la anterior generación. Además, en la suspensión trasera, se ha estrenado un sistema multibrazo (no confundir con el sistema multibrazo de un sistema independiente), que sustituye las ballestas por muelles helicoidales y mejora la progresividad, reduce la masa no suspendida y aumenta el recorrido útil entre otras virtudes.
Pero para off road, no solo importa la suspensión, y es que el sistema de tracción total de la Raptor también es de lo mejorcito. La Ford F-150 Raptor equipa un sistema 4×4 con reductora, bloqueo del diferencial central y bloqueo electrónico del diferencial trasero.Opcionalmente, puede contar con un diferencial delantero Torsen que mejora la motricidad del tren anterior.
La Ford F-150 Raptor es un Trophy truck matriculable, con un sistema de suspensión y un chasis capaz de circular muy rápido por terrenos por los que un todo terreno convencional solo soñaría
Ya hemos revisado algunas de las virtudes que hacen de la Raptor un vehículo muy especial. Ahora añádele la preparación de Shelby, que no solo se atreve con Mustangs: hablemos de la Shelby Raptor 2022.
Shelby American es un preparador estadounidense que creo que no necesita presentación si te gustan los coches. De sus instalaciones en Nevada han salido modelos tan míticos como el AC Cobra o los Mustangs GT350 O GT500 KR, preparaciones destinadas a mejorar la velocidad sobre asfalto, pero también saben hacerlo sobre tierra.
Partiendo del motor Ecoboost V6 de 3.5 litros y 450 CV, Shelby ha instalado una toma de aire de alto rendimiento, conductos de admisión de mayor diámetro, un filtro de aire de alto flujo, un intercooler de aluminio mejorado y un sistema de escape de mayor rendimiento. Con estas piezas y una reprogramación de la centralita, se consiguen 525 CV y 610 Nm de par motor. En la suspensión, por su parte, se ha instalado un kit de elevación de la marca BDS, especializada en este tipo de mejoras de alto rendimiento, dotando a la suspensión de la Shelby Raptor de todavía más recorrido útil.
La Shelby Raptor supone una vuelta de tuerca a la F-150 Raptor, con más potencia, mayor capacidad off road y un look más imponente
Sin embargo, es en el exterior donde más se hace notar que no estamos ante una Raptor cualquiera. Se aprecia un capó más trabajado, en el que se destacan más entradas de aire y salidas para evacuar el calor. Los paragolpes metálicos son más pequeños para mejorar el ángulo de ataque e incorporan luces led; multitud de luces led, para que puedas ir igual de rápido tanto por el día como por la noche.
El look exterior lo completan unas llantas específicas, gráficos y un arco en la caja sobre el que se coloca otra barra de luces led, rematadas con una placa metálica lateral. Ah, y se me olvidaba el enorme anagrama de Shelby que preside el frontal de la parrilla. Que no se confundan.
Finalmente, el interior es algo más sutil, encontrando costuras específicas, alfombrillas y logos de Shelby. También podrás ver un número de serie en el salpicadero, ya que, como es natural, se trata de un vehículo de producción muy limitado. Si estás preguntando por el precio, Shelby pide por este monstruo del off road 124,800 dólares, eso sí, incluyendo el precio del modelo “base” F-150.
Francisco Jiménez
Ingeniero mecánico adicto a todo lo que queme gasolina… y por qué no decirlo, también de lo eléctrico. Mi meta es no dejar nunca de aprender la técnica que rodea a la automoción y si ya puedo transmitir lo poco que sepa, tanto mejor. Sí, soy de esos que no recuerdan muy bien los nombres de las personas pero jamás olvidan qué coche tienen.COMENTARIOS