La marca integrada en General Motors renueva su GMC Canyon, su pick-up de tamaño mediano, que llegará al mercado en el año próximo en su tercera generación. Recibe un nuevo diseño exterior, más agresivo y voluminoso, así como una nueva opción mecánica y nuevo diseño interior, donde se integra la tecnología más moderna. Además, presenta una nueva versión, denominada AT4X, que incrementa sus capacidades todoterreno.

Marcada vocación todoterreno

Y es que ya en su configuración de serie, el nuevo GMC Canyon ofrece grandes aptitudes para las aventuras fuera del asfalto, motivadas por una mayor altura libre al suelo que su predecesor, así como un mayor ancho de vías. También ofrece un voladizo delantero más corto, puesto que se ha adelantado la posición relativa del eje delantero, con lo que se incrementa su ángulo de ataque –que es de 36,9 grados–. No se acaban aquí las modificaciones destinadas a mejorar sus habilidades todoterreno, puesto que los responsables de GMC también han eliminado la toma de aire en la parte delantera para poder incrementar aún más la altura libre al suelo en el frontal.

Incorpora como estándar neumáticos todoterreno, que en el caso de la versión AT4X están preparados para terrenos embarrados. En este acabado superior son de serie los amortiguadores Multimatic DSSV, optimizados para el rendimiento más allá del asfalto, pero que, según la marca, favorecen al mismo tiempo una sensación de confort cuando se circula por carretera. Del mismo modo, el GMC Canyon de tercera generación, en sus acabados AT4X y Denali, incluye un diferencial de bloqueo electrónico en cada eje, cuya activación estará disponible en todo momento desde el puesto de conducción.

Toda la gama del GMC Canyon 2023 está orientada a la conducción fuera del asfalto, si bien es el acabado AT4X el que incorpora soluciones que le hacen sobresalir en este ámbito, como la amortiguación Multimatic DSSV

Se ofrecerá con tan solo una opción mecánica, el motor de cuatro cilindros en línea de 2,7 litros de cilindrada que ya conocemos de su hermano Chevrolet Colorado, asociado a una caja de cambios automática de ocho velocidades. A diferencia de este, en el caso del GMC Canyon solo habrá a disposición de los clientes un nivel de potencia, el que supone el tope de gama para el caso del pick-up de Chevrolet. Entrega, por tanto, 314 CV de potencia máxima y 583 Nm de par. Se puede combinar con sistemas de transmisión de propulsión o de tracción total.

A la orden del día en cuanto a tecnología en el interior

En el interior, el GMC Canyon de tercera generación disfruta de los avances tecnológicos que ya vimos en el Chevrolet Colorado. Una pantalla central de 11,3 pulgadas se destina a las gestiones relacionadas con el infoentretenimiento, mientras que el cuadro de mandos es también digital y de 8” para los acabados de acceso –11” en el caso de las versiones Denali y AT4X–. Dispone, además, de head-up display, con unas dimensiones de 6,3 pulgadas. Cuenta con conectividad inalámbrica para los servicios de Apple CarPlay y Android Auto, y puede incluir el sistema de sonido de siete altavoces firmado por Bose, de serie en las versiones Denali y AT4X.

Desde esa pantalla central se podrá acceder a la amplia información disponible para su conductor, acerca de diversos parámetros relacionados con la conducción todoterreno, como ya vimos en el caso del Chevrolet Colorado. Se puede consultar en tiempo real la inclinación del suelo del vehículo respecto del plano del terreno, la incidencia de las fuerzas G, altímetro… También se podrá acceder a las imágenes aportadas por el sistema de cámaras bajo el suelo del coche, en caso de incorporarlo –hasta diez en este modelo, que además equipan su propio mecanismo de lavado, y que son de serie para el acabado AT4X en su edición de lanzamiento–.

Cuenta con diferentes modos de conducción, para adaptar el comportamiento dinámico del vehículo a las necesidades concretas de cada momento. Así, el GMC Canyon de 2023 permite seleccionar los siguientes modos: Terrain, para superar terrenos más técnicos y rotos, a un ritmo reducido; Off-Road, que mejora el comportamiento del vehículo en términos generales para la conducción todoterreno; y Tow/Haul, para arrastrar cargas. Además de estos tres modos, en su versión AT4X se añade el modo Baja, optimizado para una conducción todoterreno a elevada velocidad.

Cada versión del nuevo pick-up de GMC incluye un interior diferente. La madera grabada mediante láser, y los detalles en rojo y blanco en los remates del salpicadero y en la tapicería, convierten el habitáculo del GMC Canyon AT4X en un espacio marcadamente premium, en palabras de la marca

También es amplia la lista de asistentes a la conducción. Además de las luces de carretera automáticas, los asistentes de mantenimiento de carril, frenada de emergencia y la alerta de colisión frontal, entre otros, que se incorporan de serie, existen algunos paquetes opcionales a disposición de los futuros compradores que complementan estas ayudas con otras, como asistente de ángulo muerto, el control de crucero adaptativo o la alerta de presencia de peatones en la parte trasera.

La producción del GMC Canyon 2023 comenzará a principios del año próximo. Las reservas para su acabado superior, el AT4X, ya están abiertas, si bien este no empezará a ser fabricado hasta la primavera del año que viene. El precio para este GMC Canyon AT4X 2023 que ha facilitado la marca es de 63.350 dólares estadounidenses. GMC también ha revelado que la gama GMC Canyon tendrá un precio de partida de 40.000 dólares.

Galería de fotos

GMC Canyon AT4

GMC Canyon Denali

GMC Canyon AT4X