“Muchos cantantes tomaban canciones estadounidenses y reescribían las letras en italiano, y eso es exactamente lo que hemos hecho con el STL1”, explica Carlo Borromeo, el mentor de este Ford Mustang, sobre la italianización del ícono americano de parte de su firma. La casa de diseño BorromeodeSilva, con sede en Milán, acostumbra no salir de su molde, de los proyectos con los que colabora, restomods basados en referentes europeos como el Porsche 928, el Lancia Delta y el Lamborghini Diablo. Esta es una excepción que le ha servido todo en bandeja.

Con su interpretación del Mustang, conecta toda la simbología alrededor de la cultura y del modelo del óvalo. El nombre con que se lo bautizó lo dice todo. El Ford Mustang STL1 Restomod, que permite ser leído como Stallone, se presenta desde su referencia al “Semental Italiano” del cine, figura italoamericana que le sirve de analogía en su apropiación del caballo más célebre de los Estados Unidos.

Está a la vista que lo que la casa Borromeo pretendía era que este Mustang estuviera a la altura de la identidad que se le había otorgado. Un Mustang cuya condición todoterreno es tan evidente que sobran las palabras. Así y todo, detrás de su creación hay una experiencia vivida que no alcanza ni con la mejor sesión fotográfica del mundo para conocerla.

Resulta que Carlo Borromeo tiene un lazo afectivo con el Pony Car de Ford, producto de uno de esos viajes que marcan para siempre. De Nueva York a Buenos Aires en un Mustang Fastback modelo 1968 por la mítica Panamericana. “Desde las alturas de las cordilleras americanas que provocan el mal de altura hasta sus pintorescas playas de arena blanca, mientras imaginaba cómo sería su reinterpretación soñada del Mustang”, retrata Mikey Snelgar, colega de Classic Driver, a quien, por otro lado, doy crédito por las citas de Carlo.

Hemos visto restomods que, a pesar de llevar equipamientos avanzados en tecnología (…), los camuflan respetando la apariencia exterior de fábrica. Aquí no ha quedado sección sin modificar.

Bien, ahora ya sabemos lo que a lo largo de los años Borromeo ha estado ideando. Todo parte de su motor delantero Road Runner Coyote V8 5.0, que con su correspondiente puesta a punto y actualización transmite a sus ruedas la locura de sus 444 caballos de potencia máxima. Pero el V8 es, en definitiva, uno de los tantos actores que hacen a esta versión. De hecho, si se lo ve de frente, antes de abrir el capó y descubrir el Coyote se anticipa el par de luces antiniebla derivadas del rally.

El STL1 es un Mustang sometido a todo tipo de alteraciones. Incontables veces hemos visto restomods que, a pesar de llevar equipamientos avanzados en tecnología –el interior de este Mustang no es la excepción, precisamente–, los camuflan respetando la apariencia exterior de fábrica. Aquí no ha quedado sección sin modificar. Del otro lado, por ejemplo, las salidas de escape se han reubicado en el diseño de los tres pilotos verticales del modelo original.

Un todoterreno con jaula antivuelco en lugar de su techo fastback original

Lo más notable se revela abajo y arriba. Las llantas y sus discos de freno perforados de 11 pulgadas con resistentes pinzas de aluminio pueden lucirse por sí mismas, pero necesitan de la postura todoterreno del coche para resaltar definitivamente. Para ello, la altura de los paneles laterales de la carrocería se redujo para elevar la distancia al suelo. Tan importante como esto último es destacar que la casa Borromeo echó mano a los ángulos de aproximación y salida, acortando los voladizos para evitar potenciales contactos entre los paragolpes y las superficies off-road, y optimizando así el manejo y la experiencia todoterreno.

Es una especificación transgresora, pero no la única. Un Mustang puede ser coupé hardtop, de caída fastback como este ejemplar o convertible. El STL1 puede manejarse a cielo abierto, pero no es precisamente un descapotable convencional, aunque técnicamente y a su manera cumpla la función de descapotable, dado que cuenta con una capota que se monta y se desmonta. Pero no se coloca ni se retira por las vías tradicionales, sino que se ejecuta sobre una estructura tubular antivuelco que BorromeodeSilva elaboró a mano en sustitución del techo original.

La jaula está inspirada en las líneas de diseño fastback de aquel Mustang ‘68 que supo llevar a Carlo Borromeo por todo el continente americano y, al respecto, me siento representado por Carlo cuando dice que “el Fastback es el Mustang por excelencia (…) La mayoría piensa que el Coupé es el original y el Fastback es la variación, pero para mí es al revés”. El hardtop pudo haber aparecido antes, pero la mística de esta variante y su popularidad se manifiesta en casos como este.